El los ahorradores compraron $ 457 millones en marzo, un 20 por ciento menos año tras año. En detalle, fue el gasto con tarjeta por consumo en proveedores no residentes, con un neto de $281 millones, y por acumulación, con un neto de $132 millones por compra de boletos. Así lo afirmó el banco central en su último informe de tipo de cambio. El mes pasado, la autoridad monetaria vendió un total de $2.070 millones en el mercado cambiario.

En él detalle del saldo de cambio, se precisó que “el sector privado no financiero fue comprador neto de divisas por 2053 millones”. El principal sector en términos de ventas netas fue oleaginosas y granos, que registró ingresos por 689 millones. Sin embargo, este número fue un 81 por ciento más bajo que el mismo mes en 2022. Esto se debe en gran parte a las condiciones climáticas. “Esta disminución interanual se explica principalmente por la severa sequía, que afecta gravemente la producción agrícola de los principales productos de exportación”, dijo el banco central.

Un documento emitido por la autoridad monetaria señaló que “ sector real excluyendo semillas oleaginosas y cereales fue comprador neto de divisas por 2.118 millones, lo que representa una disminución interanual del 16 por ciento. Estas compras se destinaron principalmente a realizar pagos netos por importaciones de bienes por 1.277 millones, servicios e intereses por 549 millones y gastos en pasajes aéreos por 166 millones.

Mientras tanto, cambio de cuenta corriente, que incluye flujos netos por exportaciones netas de bienes y servicios e ingresos primarios y secundarios, registró un déficit de 2020 millones de dólares. Este resultado se explica por gastos netos de las cuentas de servicios, bienes y renta primaria por $866 millones, $747 millones y $432 millones, respectivamente. Por su parte, la cuenta financiera del sector privado no financiero registró un déficit de $675 millones en marzo, lo que muestra operaciones de cambio por transferencias al exterior por $386 millones. Este último monto se explica en gran medida por la contabilización del equivalente de ingresos por viajes y pasajes sin obligación de liquidar en el mercado cambiario.