“Para recuperar los ingresos reales, es urgente romper la inercia inflacionaria”, es el título del documento presentado por el Foro Económico y Laboral como “programa integral antiinflacionario”. Este encuentro de economistas, apoyado por los sindicatos de la Corriente Federal del Trabajo, tanto de la CTA como de los movimientos sociales y empresariales de la pequeña y mediana empresa, se manifiesta en oposición a la «ortodoxia económica pro-mercado (neoliberal y sus variantes) que insiste en la introducción del llamado «déficit fiscal y la cuestión monetaria» en el análisis de las causas de la inflación.

Para los firmantes, la «oferta de reparto -en la que siempre salen perdiendo los trabajadores y los pobres-, la falta de reservas, el vencimiento de la deuda externa pública y privada, el acuerdo con el FMI, así como el alto grado de concentración de los más mercados importantes con la ocurrencia determinante de empresas oligopólicas, especialmente de alimentos, son las razones más importantes del aumento de los precios”.

«Ni los salarios, ni el gasto público social, ni la ‘demanda interna excesiva’ son hoy responsables del fuerte repunte de la inflación, como afirman incluso los voceros de las grandes corporaciones locales e internacionales y sus candidatos políticos, quienes descaradamente proponen más ajustes como alternativa» y la necesidad de cumplimiento prioritario de «metas acordadas con el FMI».

Por su parte, el Foro Economía y Trabajo sostiene que “su renegociación integral, eliminando las condiciones para la toma de decisiones soberanas en materia de política económica, o en su caso su terminación, es necesaria para continuar sin una solución de continuidad, no recesiva y estrategia antiinflacionaria no regresiva».