La Dirección General del cel-AFIP desbarató un operativo de contrabando en la localidad misionera de Puerto Iguazú en la Triple Frontera, en el que 9 vehículos intentaron transportar de manera ilegal 10 toneladas de plomo y 8 toneladas de cobre a Paraguay. En un comunicado, la administración aduanera explicó que todo comenzó cuando un ciudadano paraguayo se presentó ante la inspección con la intención de salir de Argentina y dirigirse a la ciudad de Presidente Franco en el vecino país.
Cuando se le preguntó si debía declarar la mercancía en el vehículo, que tiene matrícula de su país de origen, respondió que no, que solo tenía una pequeña cantidad de residuos que se había olvidado de descargar en su casa. Los funcionarios de aduanas inspeccionaron el baúl y descubrieron que lo que el conductor llamó basura era en realidad una cantidad significativa de metales pesados. El proceso no terminó ahí: los siguientes ocho autos estaban en la misma situación y formaban una caravana de contrabando.
Tras el hallazgo, una vez pesada la mercancía, se registraron 10 toneladas de plomo tratado en bloques y 8 toneladas de chatarra de cables y tuberías de cobre, con un valor de mercado total estimado en 7.099.166,80 pesos. En este contexto, la administración aduanera procedió a decomisar la totalidad de la mercancía, ya que la cantidad detectada permitía suponer que se trataba de una exportación con fines comerciales, lo que representa una violación al régimen de equipajes.
La administración aduanera también anunció que detuvo este lunes en el paso fronterizo de San Sebastián, en la jurisdicción de Adiana de Río Grande, en la provincia de Tierra del Fuego, un camión que transportaba 22 tarimas de películas plásticas con destino a la ciudad de Buenos Aires. Los funcionarios de aduanas procedieron a cortar el precinto y abrir parcialmente la lona que cubría la carga, observando que también había compresores del tipo de los que se utilizan en los acondicionadores de aire domésticos tipo split. Cuando el conductor fue consultado sobre la presencia de estos compresores, él mismo afirmó que había 72 de ellos.
“Debido a la cantidad y valor unitario de los compresores, esta instancia continúa estableciendo conexión telefónica con la fiscalía federal de Río Grande, la cual ordena seguir el procedimiento normal y establecer conexión con el juzgado federal de primera instancia de Río Grande, que autoriza la transferencia. la escolta y el camión bajo custodia en un depósito fiscal de la zona de San Sebastián, donde se detuvo al conductor y se aseguró el medio de transporte, compresores y cuerda. Desechar la capacidad incautada (camión y compresores) por un valor total de 15.778.000 pesos, sin el secuestro de la carga declarada (película de polietileno), toda vez que el propietario de dichos bienes no estaría relacionado fundamentalmente con el hecho ilícito detectado”, dijo la oficina de aduanas. Se cree que estos compresores serían restos de procesos de fabricación que intentan pasar carga legal de contrabando y luego venderlos como repuestos en el continente.