La ministra de Energía, Flavia Royón, confirmó este jueves en el seminario IDEA en Neuquén que a partir del 1 de mayo se cancelarán todos los subsidios de luz y gas para los hogares de mayores ingresos. De esta manera, el aumento de pasajes para los usuarios del área metropolitana de Buenos Aires llegará al 60 por ciento.
Cuando el equipo del entonces ministro de Economía, Martín Guzmán, presentó el Decreto 332/22 sobre segmentación tarifaria en junio del año pasado, la gran noticia fue que todos los clientes de gas y electricidad de ingresos medios y bajos debían registrarse en un registro para gestionar subsidios. . Los funcionarios aseguraron que los requisitos exigidos para el registro dejarán fuera de los beneficios solo al 10 por ciento más rico de la población, pero el 90 por ciento restante tendrá que registrarse sí o no.
¿Qué pasa si no inician sesión? – Se preguntó entonces a Santiago López Osornio, responsable de la implementación de la segmentación.
-Se apuntan porque el proceso de registro es muy sencillo y vamos a hacer una campaña de expansión masiva. – él respondió. Sin embargo, la realidad terminó siendo muy diferente a lo que había pronosticado el funcionario.
El Decreto 332/22 establece que los hogares con ingresos superiores al 3,5 del total de las canastas básicas INDEC tipo 2 (669.298 pesos, con base en valores de marzo) perderán los subsidios de luz y gas. El plan original era que la eliminación se eliminara gradualmente en un período de 6 meses, pero el gobierno terminó retrasando la implementación porque quienes no se han inscrito en el registro de subsidios son mucho más del 10 por ciento de la población.
No se sabe exactamente cuántos de ellos terminarán pagando la tarifa completa si hoy se retirara el beneficio a todos los que no se registraron, pero por ejemplo a fines del año pasado en la provincia de Buenos Aires el 45 por ciento de los usuarios de estos servicios no fueron registrados, porcentaje que luego disminuyó un poco, pero dista mucho del 10 por ciento.
La intención oficial era seguir retrasando la implementación del plan el mayor tiempo posible, pero en la última revisión trimestral del acuerdo con el FMI, el organismo multilateral se mostró abierto sobre este punto y pidió que se acelere la eliminación de subsidios. Lo que el gobierno está haciendo ahora es moverse en esa dirección.
